Jet Set: Lo que Cayó Fue Más que un Techo

La madrugada del 8 de abril de 2025 marcó una de las páginas más tristes de nuestra historia reciente. El colapso del techo en la discoteca Jet Set dejó decenas de vidas perdidas y un país entero en duelo. En este artículo especial, reconstruimos los hechos con rigor técnico, respeto humano y vocación de aprendizaje. Desde la cronología del suceso hasta el análisis forense de la estructura, pasando por testimonios clave y propuestas de prevención, ofrecemos una mirada profunda y responsable sobre una tragedia que nos toca a todos. Porque lo que se cayó no fue solo un techo: fue parte de nuestra memoria colectiva. Y lo que aprendamos de esto puede salvar vidas en el futuro.

POLITICA Y SOCIEDAD

Ing. Andres Nova

4/9/202520 min read

“Jet Set: Lo que Cayó Fue Más que un Techo”

I. Introducción: Una Noche que Marcó a la Nación
  • Breve resumen del hecho

  • Contexto social y simbólico de Jet Set como icono cultural

  • Llamado a la reflexión técnica y ciudadana

II. Cronología de la Tragedia
  • Línea de tiempo minuto a minuto (previo, durante y posterior al colapso)

  • Declaraciones iniciales de testigos, autoridades y rescatistas

  • Primeras acciones de emergencia y evacuación

III. Descripción Técnica del Inmueble
  • Año de construcción, estructura original y reformas posteriores (si hay información)

  • Capacidad autorizada vs. asistencia real la noche del suceso

  • Materiales visibles en techado, columnas y entrepisos

IV. El Colapso: ¿Qué Pudo Fallar?
  • Hipótesis técnicas preliminares sobre el colapso del techo

    • Sobrecarga estructural

    • Daños ocultos por fuego anterior (2023)

    • Fatiga de materiales

    • Remodelaciones sin refuerzo estructural

  • Evaluación del comportamiento típico de estructuras ante cargas dinámicas

V. Normativas, Fiscalización y Vacíos Legales
  • ¿Qué exige la ley dominicana en cuanto a inspecciones estructurales?

  • ¿Cuándo fue la última inspección registrada? (si se conoce)

  • Comparativa con estándares internacionales (EE. UU., México, Chile, España)

  • Análisis de la fiscalización institucional: MOPC, ayuntamiento, cuerpos de bomberos

VI. Responsabilidades Posibles (sin imputar jurídicamente)
  • Diferencia entre causa técnica y negligencia

  • Rol del propietario, gestor del local y autoridades públicas

  • La delgada línea entre accidente e irresponsabilidad compartida

VII. Impacto Humano y Repercusiones Sociales
  • Pérdida de figuras emblemáticas (Rubby Pérez, Nelsy Cruz, Octavio Dotel)

  • Trauma colectivo y duelo nacional

  • Cobertura mediática y narrativa emocional del suceso

VIII. Lecciones y Recomendaciones para el Futuro
  • Propuesta de plan nacional de inspección de infraestructuras de uso público

  • Registro obligatorio de revisiones estructurales periódicas

  • Formación obligatoria en seguridad estructural para administradores de locales

  • Mayor rigurosidad en permisos de remodelación o sobrecarga

IX. Conclusión: Cuando la Prevención Salva Vidas
  • Llamado a la acción técnica, institucional y ciudadana

  • Reflexión final sobre la memoria y la responsabilidad

I. Introducción: Una Noche que Marcó a la Nación

El sonido del merengue retumbaba como tantas otras veces en el corazón de la discoteca Jet Set, una institución de la noche capitalina con más de cuatro décadas de historia. Era lunes por la noche, 7 de abril de 2025. Sobre el escenario, el legendario Rubby Pérez interpretaba lo que sería su última canción. Bajo el techo, centenares de personas bailaban, celebraban y compartían, ignorando que en cuestión de minutos se desencadenaría uno de los desastres civiles más dolorosos en la historia reciente de la República Dominicana.

A la 1:00 de la madrugada del martes, una sección del techo del establecimiento colapsó súbitamente. El estruendo fue brutal. Estructuras metálicas, paneles, luminarias y escombros cayeron sobre una multitud que no tuvo tiempo de reaccionar. El saldo fue devastador: decenas de fallecidos, cientos de heridos, y una nación sumida en el duelo.

Pero más allá del horror inmediato, lo ocurrido en Jet Set plantea interrogantes técnicos, éticos e institucionales. ¿Cómo un local de tal trayectoria pudo venirse abajo de forma tan repentina? ¿Existían señales previas de deterioro? ¿Fue un accidente inevitable o el resultado de una cadena de omisiones?

Este artículo no busca explotar la tragedia desde el morbo. Tampoco pretende asignar culpas sin pruebas. Nuestro propósito es distinto: reconstruir los hechos desde la precisión cronológica y el análisis estructural, y ofrecer —con respeto y rigurosidad— una mirada profesional que ayude a entender, aprender y evitar que algo así vuelva a repetirse.

Lo que sigue no es solo una crónica. Es también una Hipótesis  técnica, un llamado a la conciencia pública, y una advertencia a quienes gestionan espacios donde la vida humana depende de decisiones estructurales invisibles, pero vitales.

II. Cronología de la Tragedia (Actualizada)

Lunes 7 de abril de 2025

8:30 p.m. – El icónico “lunes de Jet Set” inicia como de costumbre.

La noche del lunes, en lo que sería una entrega más del tradicional "Lunes de Jet Set", cientos de personas comenzaron a llegar al reconocido centro nocturno ubicado en la Av. Independencia. La cartelera artística anunciaba la participación del legendario Rubby Pérez, lo que elevó la expectativa del público.

9:00 p.m. – Afluencia masiva y ambiente festivo.

Testigos afirman que el local se encontraba completamente lleno. El ambiente era eléctrico: luces, baile, y un público multigeneracional disfrutando del repertorio clásico del merengue.

10:45 p.m. – Inicia el concierto de Rubby Pérez.

Rubby sube al escenario entre vítores. La interpretación incluye temas clásicos y guiños a la nostalgia de los años dorados del merengue. Videos publicados en redes muestran al artista en plena actuación poco antes del colapso.

Martes 8 de abril de 2025

12:45 a.m. – Ambientes de euforia, sin señales evidentes de peligro.

Según los primeros testimonios, no se observaban grietas, chasquidos ni indicios alarmantes antes del desplome. Algunos asistentes relatan haber sentido vibraciones o movimientos en la estructura minutos antes del incidente, pero nada fuera de lo común en un concierto.

12:57 a.m. – Colapso súbito del techo.

Una gran sección del techo cede repentinamente mientras el concierto continúa. El derrumbe ocurre sobre una zona de alta densidad de personas. El escenario y parte del área VIP son impactados directamente por el colapso. La energía eléctrica se interrumpe y el lugar cae en caos total.

1:00 a.m. – Estampida y llamados de auxilio.

Asistentes logran salir por las puertas laterales. Algunos graban videos en medio de la confusión y solicitan ayuda a través de redes sociales. Otros buscan a familiares atrapados bajo escombros. El ambiente es de desesperación total.

1:10 a.m. – Llegan unidades del 9-1-1, Defensa Civil y bomberos.

Las labores de rescate comienzan en condiciones de alta dificultad. Escombros, oscuridad, humo y temor a nuevos colapsos dificultan el trabajo. Se solicita apoyo médico de emergencia.

2:30 a.m. – Se habilitan hospitales de referencia.

Los principales hospitales de Santo Domingo comienzan a recibir heridos. Se declara emergencia médica. Clínicas privadas también se activan y reciben pacientes en estado crítico.

3:00 a.m. – Confirmación de múltiples fallecidos.

Las autoridades confirman los primeros decesos. Aún no se ofrece una cifra oficial, pero medios internacionales reportan decenas de víctimas. Entre ellas, se especula la presencia de figuras públicas.

5:00 a.m. – El país despierta con una tragedia nacional.

El colapso se convierte en noticia principal en todos los portales. Las redes sociales inundan de homenajes, condolencias y llamados a esclarecer lo sucedido.

7:30 a.m. – El gobierno declara duelo nacional.

El presidente Luis Abinader decreta tres días de duelo nacional y promete una investigación exhaustiva e independiente para esclarecer los hechos

III. Descripción Técnica del Inmueble

La discoteca Jet Set, ubicada en la Avenida Independencia de Santo Domingo, era mucho más que un local de entretenimiento nocturno. Era una institución cultural con más de 40 años de historia, famosa por sus “lunes de merengue” y por ser escenario habitual de artistas nacionales e internacionales.

Desde el punto de vista técnico, el inmueble puede clasificarse como una estructura comercial de uso público con elementos arquitectónicos y estructurales típicos de construcciones de mediados a finales del siglo XX, posiblemente con múltiples intervenciones y remodelaciones a lo largo del tiempo.

1. Tipología estructural general

Aunque no se ha hecho pública aún una ficha técnica detallada del edificio, por observación y testimonios podemos asumir que Jet Set estaba compuesto por:

  • Un sistema estructural de pórticos prefabricados de hormigón armado, con techado de losas de hormigos indeterminada aun .

  • Cubierta de lámina metálica o panel tipo sándwich en zonas anexas (acero galvanizado con aislante térmico).

  • Cielorraso interior suspendido, probablemente de yeso, PVC o material liviano decorativo.

  • Columnas y vigas posiblemente combinaban materiales metálicos y concreto armado, dependiendo de si es la parte central o los anexos. 

Nota : Toda esta información es solo por la apreciación visual de las imágenes transmitidas en las noticias, por lo que todo esto esta sujeto a confirmacion.

2. Capacidad y uso

El local tenía capacidad estimada de 500 a 800 personas, según eventos. Durante los conciertos más populares, como el que tuvo lugar el 7 de abril de 2025, esta cifra podría haberse superado, aunque hasta el momento no se ha confirmado si la ocupación excedía el aforo autorizado.

Los equipos utilizados —incluyendo estructuras de iluminación, sonido profesional, pantallas y decoración suspendida— representan una carga adicional significativa sobre el sistema de techado y sobre los puntos de anclaje.

3. Intervenciones y mantenimiento

De acuerdo con reportes de prensa y declaraciones no oficiales, Jet Set habría sufrido un incendio parcial en el año 2023. Aunque no se ha confirmado el alcance del daño estructural, cualquier siniestro de este tipo puede afectar:

  • Las propiedades mecánicas del acero (pérdida de resistencia, deformación permanente).

  • El recubrimiento anticorrosivo o ignífugo de los elementos.

  • El sellado e impermeabilidad del techo, provocando corrosión acelerada.

Una hipótesis a considerar en la investigación es si posterior a ese incendio se realizaron las evaluaciones estructurales requeridas por normativa, y si las remodelaciones o refacciones posteriores (si las hubo) fueron registradas, supervisadas y aprobadas por profesionales colegiados.

4. Condiciones observables previas al colapso

Hasta ahora, no hay evidencia pública de advertencias visibles (grietas, deformaciones, desplazamientos, filtraciones importantes). Sin embargo, varios testigos han mencionado vibraciones o crujidos anómalos en los minutos previos al colapso, lo cual puede indicar un fallo progresivo silencioso en la estructura, no necesariamente visible para los asistentes.

Estos detalles serán clave en los peritajes posteriores, particularmente para determinar si el derrumbe fue súbito (por sobrecarga inesperada) o progresivo (por deterioro acumulado).

En resumen, el inmueble de Jet Set reunía múltiples factores de riesgo: antigüedad, remodelaciones acumuladas, posible daño por fuego, alta ocupación, y falta de información técnica pública sobre su mantenimiento. Todo ello hace imprescindible una investigación estructural forense profunda, que permita identificar si lo ocurrido fue un accidente inevitable o una tragedia anunciada.

IV. El Colapso – ¿Qué Pudo Fallar?(Con base en el testimonio del Ing. Ángel Augusto Volques)

Una de las claves técnicas más valiosas que ha surgido tras el colapso de la discoteca Jet Set proviene del ingeniero Ángel Augusto Volques, testigo presencial del desastre y sobreviviente. En declaraciones ofrecidas en el programa “Esta Noche Mariasela”, el ingeniero afirmó que, por las características visuales del techo colapsado y su comportamiento durante la caída, su impresión profesional es que se trataba de una estructura de vigas de hormigón postensado o pretensado.

Esta observación, aunque no sustituye un peritaje oficial, es altamente relevante desde el punto de vista forense y orienta el análisis técnico hacia un sistema estructural particular, con comportamientos y vulnerabilidades bien conocidos en ingeniería civil.

1. ¿Qué son las vigas postensadas o pretensadas?

Las vigas postensadas y pretensadas son soluciones de ingeniería avanzada utilizadas para cubrir grandes luces sin necesidad de apoyos intermedios. Funcionan gracias a cables de acero de alta resistencia tensados dentro del hormigón, que generan una compresión interna capaz de contrarrestar la flexión producida por el peso.

  • En el pretensado, los cables se tensan antes del vaciado del hormigón.

  • En el postensado, el tensado ocurre después del fraguado, con sistemas de anclaje.

Este tipo de sistemas permite estructuras ligeras, resistentes y de aspecto limpio, como la que presentaba Jet Set. Pero también exigen precisión, mantenimiento especializado y un control riguroso de cualquier intervención posterior.

2. Cargas muertas no contempladas: un enemigo silencioso

Una viga postensada está diseñada para trabajar con un equilibrio milimétrico entre tensión y carga. En Jet Set, según los testimonios técnicos y las imágenes del lugar, sobre esa losa se habían añadido:

  • Unidades de aire acondicionado industriales, de gran peso puntual.

  • Plataformas técnicas o racks para sistemas eléctricos y luces.

  • Múltiples capas de recubrimientos como mortero, selladores e impermeabilizantes.

Estos elementos representan una sobrecarga muerta que, aunque no cambia día a día, transforma completamente la dinámica de esfuerzos para la que fue concebido el sistema estructural original. Una viga postensada sometida a carga adicional mal distribuida puede perder su tensado efectivo, provocar fisuración, desprendimientos o, como pudo haber ocurrido aquí, un colapso súbito.

3. Impacto de un incendio previo sobre el sistema postensado

Otro factor crítico en esta tragedia es el incendio ocurrido en Jet Set en el año 2023. Aunque en su momento se trató como un evento controlado, no se han encontrado informes públicos que indiquen una evaluación estructural posterior.

En el caso de estructuras postensadas, el fuego puede ser devastador, incluso sin deformación inmediata visible:

  • Los torones de acero o fibras de alambres que forman los cables, pueden perder tensión por dilatación térmica.

  • El revestimiento interno puede sufrir microfisuras que permiten la entrada de humedad.

  • Si el sistema no fue reinyectado ni recalibrado tras el fuego, el equilibrio de cargas quedó comprometido.

La falta de inspección especializada posterior a un evento de alta temperatura en este tipo de estructura es una omisión de alta gravedad técnica.

4. Riesgo de corrosión oculta y fatiga progresiva

A diferencia del hormigón armado convencional, donde las varillas están relativamente accesibles para inspección, en el hormigón postensado los cables tensores están completamente embebidos. Eso significa que la corrosión interna puede avanzar durante años sin señales visibles.

Cuando hay fisuras, humedad, filtraciones o fuego previo, los torones pueden:

  • Perder sección útil.

  • Desprenderse de los anclajes.

  • Corroerse en los extremos, donde se ubica la tensión crítica.

En esos casos, el colapso no solo es posible, sino esperable si no se realiza mantenimiento especializado o reforzamiento.

5. Hipótesis del fallo localizado por desequilibrio estructural

Todo indica que en Jet Set el colapso comenzó en una zona específica del techo, justo en el área donde estaban los equipos de climatización. La hipótesis técnica más plausible es:

  • Fallo puntual de una viga postensada por pérdida de tensado, corrosión interna o sobrecarga.

  • Desprendimiento de una sección de losa anclada a esa viga.

  • Reacción en cadena por pérdida de apoyo lateral o redistribución súbita de cargas.

Este tipo de fallo es característico en estructuras postensadas cuando el mantenimiento, la inspección y las intervenciones técnicas no son llevadas con rigurosidad.

Conclusión técnica

El testimonio del ingeniero Ángel Augusto Volques aporta un elemento clave: la tragedia no ocurrió en una estructura común, sino en una de alta exigencia técnica, que requería un control riguroso y permanente.

Si las vigas eran efectivamente postensadas o pretensadas, como sugiere su experiencia directa, entonces las intervenciones realizadas tras el incendio, la acumulación de peso, y la ausencia de peritajes posteriores, representan una cadena crítica de vulnerabilidad técnica que debió haberse detectado y corregido a tiempo.

En este tipo de estructuras, la prevención no es opcional. Es una condición de funcionamiento seguro.

V. Normativas, Fiscalización y Vacíos Legales

Cuando una estructura colapsa, la pregunta no es solo qué falló técnicamente, sino quién debió haberlo previsto, inspeccionado, regulado o corregido a tiempo. El caso de la discoteca Jet Set expone con crudeza las grietas —no solo en el hormigón, sino en el sistema dominicano de fiscalización estructural— que permiten que estructuras con fallos latentes sigan en funcionamiento por años sin intervención.

1. Marco normativo dominicano: suficiente en papel, débil en aplicación

La República Dominicana cuenta con normas técnicas relevantes, especialmente el Reglamento para el Análisis y Diseño Sísmico de Estructuras (R-001), que regula aspectos fundamentales del diseño estructural para nuevas edificaciones.

Sin embargo, no existe una ley específica que obligue a realizar evaluaciones estructurales periódicas a edificaciones existentes, a menos que se trate de infraestructuras críticas del Estado (hospitales, puentes, escuelas) o se haya emitido un reporte de riesgo.

Para los locales comerciales privados —como discotecas, bares o salones de eventos—:

  • No hay un protocolo nacional obligatorio de inspección estructural cada “X” años.

  • No se exige certificación técnica posterior a remodelaciones estructurales.

  • No se establece la figura de “responsable estructural continuado” (como ocurre en países como Chile o España).

Esto deja en manos del propietario la decisión de si revisar o no el estado de su inmueble, incluso después de un evento extremo como un incendio.

2. Ausencia de seguimiento post-incendio

Tras el incendio en Jet Set en 2023, no se ha hecho público ningún informe técnico emitido por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), ni por el Cuerpo de Bomberos, que haya exigido una evaluación estructural o un reforzamiento de la losa afectada.

Tampoco se ha encontrado evidencia de que se haya emitido una orden de cierre preventivo para verificar la seguridad estructural del inmueble, lo cual debió ser un paso automático tras un siniestro de esa naturaleza. Esto apunta a una falla institucional múltiple en la cadena de supervisión.

3. Fiscalización municipal débil o inexistente

En muchos municipios dominicanos, los departamentos de planeamiento urbano están subdimensionados, carecen de ingenieros estructurales con funciones fiscalizadoras activas, o no tienen mecanismos para revisar el estado de edificios en uso continuo con aforo elevado.

La discoteca Jet Set operaba bajo licencia municipal desde hace décadas, pero no consta (hasta ahora) que haya sido sometida a inspección estructural ni tras el incendio, ni tras remodelaciones que incluyeron la instalación de equipos pesados sobre su losa.

Esto revela una ausencia de fiscalización activa por parte del cabildo correspondiente, o una brecha normativa que no le otorga facultades para exigir tales revisiones.

4. Comparativa internacional: el estándar es más alto

Países con alto riesgo sísmico o historial de tragedias edilicias (como México, Chile, Japón o España) cuentan con:

  • Registros de mantenimiento estructural obligatorios.

  • Certificaciones de seguridad vigentes para locales públicos.

  • Protocolos post-incendio, post-sismo y post-inundación.

  • Auditorías aleatorias o tras denuncias ciudadanas.

En países como España, por ejemplo, los Ayuntamientos exigen la Inspección Técnica de Edificios (ITE) para construcciones mayores a 30 años, especialmente en zonas de alta ocupación.

5. ¿Quién vigila a los locales privados con alto riesgo público?

En la práctica, los locales comerciales de alta concurrencia (discotecas, estadios, centros de convenciones) operan sin revisión técnica estructural obligatoria, a menos que haya una denuncia, un cambio de uso o una catástrofe.

La tragedia de Jet Set revela una realidad incómoda:

La seguridad estructural del entretenimiento nocturno en la República Dominicana depende más del criterio individual que de la norma colectiva.

Conclusión normativa

El país carece de una cultura legal de prevención estructural, y no hay mecanismos institucionales activos que obliguen a detectar y corregir riesgos antes de que se conviertan en tragedias. El vacío no es solo técnico: es legal, político y moral.

Jet Set pudo ser evaluado tras su incendio. Pudo ser reforzado. Pudo ser inspeccionado. No lo fue. Y ahora, lo que colapsó no fue solo una losa: colapsó la confianza en que alguien estaba cuidando vidas desde lo invisible.

VI. Responsabilidades Posibles (sin imputar jurídicamente)

Cuando una estructura colapsa y causa pérdida de vidas, la responsabilidad no recae exclusivamente en un tornillo suelto o una viga oxidada. Las fallas estructurales suelen ser el último eslabón de una cadena más amplia: una sucesión de omisiones, decisiones postergadas o controles que nunca se ejercieron.
En el caso de Jet Set, sin atribuir culpabilidad legal a ninguna persona o entidad, es posible —y necesario— reflexionar sobre los ámbitos de responsabilidad técnica, operativa e institucional que pudieron haber influido en la tragedia.

1. Propietario o administración del inmueble

Quien administra un local de uso público tiene la responsabilidad técnica, moral y legal de garantizar la seguridad estructural de sus instalaciones. Esto implica:

  • No modificar o sobrecargar techos o losas sin recalcular la estructura.

  • No acumular capas de recubrimiento sin supervisión técnica.

  • Realizar mantenimientos preventivos periódicos.

  • Encargar inspecciones estructurales tras incendios o eventos adversos.

Instalar unidades de climatización de gran peso sobre una losa de hormigón armado, sin estudios técnicos actualizados, puede haber sido una acción imprudente, aunque no ilegal bajo la legislación actual.

2. Profesionales técnicos (si intervinieron en remodelaciones)

Si existió participación de ingenieros, arquitectos o técnicos en instalaciones o remodelaciones posteriores al incendio de 2023, estos tendrían una responsabilidad profesional de advertir sobre posibles sobrecargas o solicitar refuerzos estructurales.

El Código de Ética Profesional del CODIA (Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores) establece que los profesionales deben abstenerse de intervenir en obras si no se garantiza la seguridad estructural. Si se omitieron estudios, cálculos o advertencias necesarias, podría hablarse de una falta al deber profesional, sin necesidad de imputación penal.

3. Cuerpo de Bomberos / Autoridad de emergencias

Tras un incendio como el ocurrido en 2023, los bomberos están facultados para emitir informes de evaluación y recomendaciones de cierre parcial o total del inmueble si detectan condiciones de riesgo. Si tras ese evento se reabrió el local sin exigir o verificar una inspección estructural, la omisión sería grave.

La Ley 147-02 de Gestión de Riesgos y Desastres establece que toda infraestructura afectada por fuego debe ser evaluada por técnicos competentes antes de su reocupación. Si esto no se realizó, hubo una brecha de cumplimiento técnico e institucional.

4. Ayuntamiento local / Dirección de Planeamiento Urbano

La licencia de funcionamiento de un local como Jet Set debió estar sujeta a inspecciones periódicas de seguridad, aunque la ley actual no obliga explícitamente a revisión estructural. Aun así, existen atribuciones municipales en cuanto a:

  • Otorgamiento de permisos para instalaciones mecánicas (como aires acondicionados).

  • Fiscalización de reformas físicas del local.

  • Seguimiento a las condiciones del inmueble tras reportes de emergencia.

Si el cabildo no actuó tras el incendio de 2023 o permitió reformas sin verificación, se configura una responsabilidad administrativa indirecta.

5. Sistema normativo nacional

La responsabilidad también es estructural y colectiva. En ausencia de un marco legal que obligue a revisar estructuras antiguas, evaluar post-incendios, y certificar techos con cargas técnicas, no se puede pedir cumplimiento de normas que no existen. Esta es una falla sistémica.

“Lo que no está reglamentado, se deja a la suerte. Y lo que se deja a la suerte, algún día colapsa.”

Conclusión ética

Identificar responsabilidades no es buscar culpables a la ligera, sino comprender cómo una estructura puede fallar cuando nadie asume el deber de pensar en lo que no se ve: la carga silenciosa, la fisura que avanza, la losa que resiste en silencio… hasta que ya no puede más.

Jet Set no cayó por un acto puntual de negligencia individual, sino por una cultura donde lo estructural se deja para mañana, lo técnico se reemplaza por lo práctico, y lo invisible no se fiscaliza.

VII. Impacto Humano y Repercusiones Sociales

La madrugada del martes 8 de abril de 2025, el país despertó con una herida abierta. Lo que había sido una noche de música, nostalgia y alegría en la discoteca Jet Set se transformó en minutos en un episodio de luto colectivo. Las imágenes del colapso recorrieron el país antes del amanecer. Los nombres de los fallecidos —entre ellos artistas, funcionarios, deportistas y ciudadanos comunes— comenzaron a llenar las redes sociales y los grupos de WhatsApp.

La República Dominicana no perdió solo a personas: perdió símbolos, referentes y lugares emocionales.

1. Las víctimas: rostros del merengue, del pueblo y del país

Entre los fallecidos se encuentran figuras profundamente queridas y reconocidas:

  • Rubby Pérez, ícono del merengue, quien falleció mientras cantaba, literalmente entregado a su arte sobre el mismo escenario que lo vio consagrarse durante décadas.

  • Nelsy Cruz, gobernadora de Monte Cristi y figura de fuerte arraigo en la región noroeste. Su presencia en el lugar no era casual: representaba la mezcla de poder, cercanía y vida social que caracterizaba a Jet Set.

  • Octavio Dotel, exlanzador de Grandes Ligas, símbolo del orgullo deportivo nacional. Su pérdida sacudió al béisbol tanto local como internacional.

Y junto a ellos, decenas de ciudadanos: jóvenes que acudieron por la música, padres de familia que buscaban revivir una época dorada, empleados del local que conocían el sonido de cada noche.

2. Duelo nacional: tres días, una historia, una deuda

El presidente Luis Abinader declaró tres días de duelo nacional. Las banderas ondearon a media asta. Artistas, periodistas, deportistas y ciudadanos comunes se unieron en una misma pregunta:

¿Cómo pudo ocurrir esto… aquí, ahora, así?

La tragedia tuvo eco en medios internacionales, con titulares que vincularon el colapso con fallas estructurales. Pero para el país, la pérdida fue mucho más profunda: fue cultural, simbólica y afectiva. Jet Set era, para miles de dominicanos, un espacio de memoria emocional, donde el merengue se celebraba como identidad, no solo como música.

3. Crisis de confianza en la infraestructura social

Este suceso ha desencadenado un cuestionamiento mayor:

Si colapsó Jet Set, ¿qué otros lugares públicos podrían estar al borde del fallo sin que lo sepamos?

Las familias comenzaron a preguntarse por la seguridad de los colegios, los centros comerciales, los templos y los estadios. La tragedia activó una alarma social sobre la invisibilidad del riesgo estructural, especialmente en edificaciones antiguas no revisadas.

4. Repercusiones políticas, legales y mediáticas

  • En el Congreso Nacional ya se discute la propuesta de una ley que exija certificación estructural obligatoria para locales de alta concurrencia.

  • Los gremios profesionales han convocado foros sobre ética estructural y responsabilidad técnica.

  • Los medios han iniciado una cobertura más rigurosa sobre la seguridad de infraestructuras privadas.

La tragedia ha puesto en el centro de la conversación pública una verdad incómoda: lo que no se ve también puede matar.

5. El luto como catalizador de memoria y cambio

El país está de duelo, pero también está alerta. Las redes sociales han funcionado como archivo de memoria viva: recopilando homenajes, anécdotas, canciones de Rubby, entrevistas con sobrevivientes, y denuncias de fallas estructurales en otras edificaciones.

Este es el momento —como sociedad— de convertir el dolor en política pública, el luto en legislación, y el miedo en acción preventiva.

Conclusión emocional:

Jet Set no era solo una discoteca. Era un punto de encuentro intergeneracional. Un templo profano del merengue. Un lugar donde la gente se sentía viva. Su caída es una metáfora dolorosa: nos recuerda que incluso las estructuras más icónicas pueden venirse abajo si no se cuidan desde dentro.

Hoy, más que llorar lo que perdimos, estamos obligados a proteger lo que aún puede ser salvado.

VIII. Lecciones y Recomendaciones para el Futuro

La tragedia del colapso en Jet Set no puede quedar archivada como un caso aislado. Su magnitud humana, técnica y simbólica exige que se convierta en un punto de inflexión. Porque si no se aprende de una pérdida así, se está condenado a repetirla —y peor aún, a normalizarla.

Aquí algunas lecciones fundamentales y recomendaciones específicas que deben ser consideradas por el Estado, los gremios profesionales, los municipios, y por cada dominicano que habita una estructura que envejece en silencio.

1. Establecer un sistema nacional de inspección estructural periódica

Propuesta: Crear un marco legal que obligue a todo edificio de uso público o alta concurrencia (discotecas, estadios, centros comerciales, templos, centros culturales, escuelas privadas, etc.) a pasar una inspección técnica estructural cada 5 años.

La inspección debe ser realizada por profesionales colegiados, certificados por el MOPC, y registrada en una base nacional pública. En caso de reformas, incendios, sismos o inundaciones, la inspección debe ser inmediata y obligatoria.

2. Registro estructural obligatorio para locales comerciales

Toda estructura con más de 20 años debe tener un “expediente estructural digital”: planos, cargas estimadas, intervenciones, inspecciones, y evaluaciones post-evento. Este registro serviría como historial técnico accesible para las autoridades y la ciudadanía.

Jet Set, como muchas estructuras similares, no contaba con ningún documento público actualizado que confirmara su estado estructural.

3. Prohibir instalaciones técnicas pesadas sin recalculo estructural

Ninguna empresa debe instalar aires acondicionados industriales, torres, pantallas, plataformas o equipos de gran peso sobre techos o losas sin el aval formal de un ingeniero estructural registrado. La violación de esta norma debe conllevar sanciones tanto para el proveedor como para el propietario.

En Jet Set, esta fue una de las causas posibles más críticas del colapso.

4. Crear un cuerpo nacional de auditoría estructural

Así como existe la Cámara de Cuentas para la fiscalización financiera, debe existir un órgano autónomo de verificación estructural, vinculado al MOPC pero con independencia técnica, que pueda:

  • Auditar edificaciones con alto riesgo potencial.

  • Emitir informes obligatorios tras siniestros.

  • Coordinar simulacros y protocolos de seguridad edilicia.

5. Formación obligatoria en ética estructural para profesionales

El país necesita promover una nueva cultura profesional donde los ingenieros, arquitectos y técnicos tomen decisiones pensando en vidas humanas, no solo en funcionalidad o estética. Esto requiere reforzar la enseñanza de:

  • Patologías estructurales.

  • Ética del diseño.

  • Responsabilidad profesional post-construcción.

6. Educación ciudadana sobre riesgo estructural

Así como hoy se enseña a no conducir en estado de embriaguez, el país debe aprender a reconocer señales de deterioro estructural: grietas, humedad, deformaciones, vibraciones anómalas.
El Estado puede desarrollar campañas educativas masivas para que cada ciudadano sea parte de la prevención.

7. Memorial estructural para no olvidar

Jet Set merece un memorial. No solo para Rubby Pérez, Octavio Dotel, Nelsy Cruz y las demás víctimas, sino como símbolo. Un espacio donde se recuerde que la prevención también salva vidas. Que los planos mal calculados también matan. Y que cada losa revisada a tiempo es una vida que se mantiene de pie.

Conclusión propositiva:

La historia de Jet Set debe marcar el inicio de una era de responsabilidad estructural en la República Dominicana.
Ya no hay excusas. La ciencia está disponible. El conocimiento técnico existe. Lo que falta ahora es la voluntad de proteger a las personas, incluso cuando la amenaza no se ve.

IX. Conclusión – Cuando la Prevención Salva Vidas

Hay estructuras que caen sin aviso. Pero hay otras que caen con todos los avisos previos escritos en silencio, en grietas no atendidas, en techos sobrecargados, en informes que nunca se pidieron, en normas que nunca se exigieron.

El colapso del techo de la discoteca Jet Set fue una tragedia evitable. Las señales estaban ahí: un incendio en 2023, una estructura antigua, una losa con capas sucesivas de mortero, equipos pesados instalados sin recalculo aparente. Pero nadie escuchó. O nadie quiso mirar. Y cuando no se mira hacia arriba, el techo deja de sostener.

No fue solo el techo lo que cayó aquella madrugada del 8 de abril de 2025. Cayó la confianza en que los lugares que amamos están protegidos. Cayó un ícono de la cultura dominicana. Y con él, decenas de vidas. Algunas famosas. Otras anónimas. Todas igualmente valiosas.

Ahora nos toca a nosotros levantar algo nuevo. No un techo, sino un sistema. Una forma distinta de entender la responsabilidad estructural, donde la prevención deje de ser un gasto y pase a ser un acto de amor colectivo.

Porque la próxima tragedia puede estar en un colegio, en un estadio, en una iglesia, en un centro comercial. O puede no ocurrir nunca, si entendemos que la prevención no salva edificios: salva personas.

Ing. Andres A. Nova